El Che no ha muerto

Por: Julián Puig Hernández .

Lo sucedido allá, en la escuelita de La Higuera, tiene símbolos impredecibles y uno de ellos está relacionado con el nacimiento, con más fuerza aún, del héroe eterno de la América Nuestra: Ernesto Che Guevara.

Palomas blancas salieron en distintas direcciones de la escuela, prestas a anunciar el mundo el prodigioso parto.

Lejos de silenciarlo, como quisieron, su voz se hizo más diáfana y el ejemplo se convirtió en sendero por donde ha de andar el hombre nuevo, ese que estamos empeñados en que pueble nuestros países.

Todas las voces, todas…la del indio, el obrero, la mujer, los cantantes, poetas, hicieron el eco eterno, para que no muera la esperanza de un mundo mejor, el sendero que el Guerrillero Heroico tomó para ofrendar su material existencia.

Los que se ensañaron no pudieron imaginar, en el primer instante, la trascendencia de su muerte, pues no fue tal, sino lo contrario.

En los niños y jóvenes que estudian, en los deportistas, los trabajadores esforzados, en los que día a día salen a las calles llenos de pancartas a protestar, los que se enfrentan a la policía, los que mueren con decoro, ahí está la imagen inquebrantable del Che.

En un día como hoy rendimos homenaje, una vez más, al caballero del alba encendida como bien lo definiera la poetisa Mirtha Aguirre.

Canción antigua al Che Guevara
Mirta Aguirre
¿Dónde estás, caballero gallardo
Caballero sin miedo y sin tacha?
En el viento, señora, en la racha
Que acicala la llama en que ardo.
¿Dónde estás, caballero gallardo,
caballero sin tacha y sin miedo?
En la flor que a mi vida concedo;
En el cardo, señora, en el cardo.
¿Dónde estás, caballero seguro,
caballero del cierto destino?
Con la espalda solapando camino
Al futuro, señora, al futuro
¿Dónde estás, caballero el más puro
caballero del cierto destino?
Encendiendo el hachón guerrillero
En lo oscuro, señora, en lo oscuro
¿Dónde estás, caballero el más fuerte,
caballero del alba encendida?
En la sangre, en el polvo, en la herida,
En la muerte, señora, en la muerte
¿Dónde estás, caballero ya inerte,
caballero ya inmóvil y andante?
En aquel que haga suyo mi guante
Y mi suerte, señora, mi suerte
¿Dónde estás, caballero de gloria,
caballero entre tantos primero?
Hecho saga en la muerte que muerto;
Hecho historia, señora, hecho historia.